Mision 1-B Siberia (By Santuario)

**De que forma espectacular el guerrero de los hielos habia acabado con la bestia mitologica de cientos de brazos, evidentemente el heroe hacia galarde de su fuerza y su titulo como caballero de oro atheniense. Asimismo los cobardes aldeanos salvados lo vitoreaban y lo aplaudian, felices de poder celebrar un momento mas de su miserable vida, pero solo un momento mas.
Lo que el Acuariano ignoraba era que su gran hazaña no habia sido mas que una mera distraccion, pues lo que para el mundo terrestre parecia ser increible y poderoso como el kraken, no era mas que un debil esbirro al servicio del emperador Poseidon. Y para desgracia del pobre Ateniense y los ignorantes pobladores, la entera pelea habia sido grabada, cada movimiento del Acuariano estudiado... Pero ¿Por quien?. Una duda imposible de averiguar por el momento.
Minutos despues de que el alboroto cesara, una figura nueva se presentaba cerca de la grieta abierta por el Kraken que presentaba un torbellino acuatico de misteriosas dimensiones. Una figura femenina, de aspecto hermoso y jovial, una virgen rebestida de santidad y pasion, que en signo de oracion, postrada de rodillas en el frio hielo, rezaba para si misma con los ojos cerrados sin prestarle atencion a todo el jubileo de la gente. Su entera imagen parecia desfigurarse por momentos, en cuanto el frio viento azotaba su cuerpo y elevaba sus cabellos al aire cubiertos por un velo de seda fino y blanco. Una joven asi no pasaria desapercibida mucho tiempo, a los pocos segundos la vista de algunos aldeanos comenzo a rodearla. De un momento al otro la multitud dejo de celebrar la victoria del caballero y entonces 6 hombres, 6 aldeanos del sexo masculino caminaron hacia la mujer, cuya silueta seguia desfigurandose por momentos, cuya oracion parecia no terminar nunca. En fin, los 6 hombres se posaron frente a la mujer adorando su cuerpo, encantados con su belleza, como si hubieran caido en un embrujo de amor.
Lentamente el miedo se fue apoderando de todos los que observaban, algunos comenzaron a alejarse como sabiendo lo que sucederia, temerosos del destino incierto que podrian sufrir, pero los 6 hombres seguian ahi, hasta que de un momento para el otro, todo parecio terminar. Uno a uno los hombres fueron cayendo al suelo presas de un agobiante dolor, combulsionandose y temblando de agonia sobre la helada capa de hielo. ¿Que les pasaba? marcas comenzaron a aparecer en sus cuerpos, heridas desgarradoras que parecian causarles el dolor que padecian, finalmente el dolor termino y un grito ahogado de esos 6 hombres fue lo ultimo que se les escucho. Estaban muertos ahora, pero la mujer seguia en la misma posicion, inmutable continuaba rezando oraciones del mar, de la muerte y de la vida. Todo era confuso, demasiado para la gente que habitaba la tierra, el poder de Poseidon parecia ir mas alla de la imaginacion humana, el kraken fue solo un esbirro, y ante los ojos de los hombres, una prueba mayor del poder de dios estaba mostrandose. Invitando al caballero de Acuario a que pruebe el dulce y mortal embrujo del mar. ¿Tendria Camus el valor de enfrentarlo?**

**No importaba lo que pasara, no importaba lo que dijeran. Las palabras del Dorado solo se desvanecieron en el silencio que creo la joven al no contestar jamas. Asimismo, su oracion continuaba, su rostro se marcaba de tristeza y pasion a cada segundo que pasaba en aquella posicion, por momentos su rostro yacia oculto por su velo y por instantes su belleza angelical se mostraba absoluta ante los ojos de los presentes, nada parecia detener su rezo, ni siquiera lo que estaria por suceder.
En consecuencia del cosmos que la chica de largos cabellos expulsaba con su suplica, el viento comenzo a soplar con mas fuerza, pronto la fria capa de hielo se veia desgastada por el golpe eolico, salvaje e indescriptible, que con cuyo poder levantaba furioso los trozos gelidos que practicamente lijaba del suelo. Asimismo, grietas comenzaron a verse alrededor de la joven, zurcos profundos por los que el agua del fondo parecia escaparse, un leve temblor se hizo presente. Los aldeanos entraban en panico, pronto los cadaveres de los 6 hombres que se acercaron a la joven fueron tragados por el frio oceano bajo las capas de hielo, homenaje sagrado a su muerte por las criaturas del mar, que los reclamaban como trofeos en la guerra.
El aire seguia asotando y nubes de escarcha volaban por doquier danzando en una tempestad pero, a diferencia de los aldeanos que corrian asustados, la joven continuaba con su transparente imagen clavada al suelo, rezando ante el caos surgido. Si esto seguia asi, el pueblo entero con sus habitantes seria tragado por el mar debajo de ellos, corriendo la misma suerte que aquellos que fueron reclamados anteriormente. A estas alturas el caballero de oro debia estar enfurecido, asustado y confundido, abrumado por el poder de las criaturas del mar ¿Cual seria su forma de actuar? **

**- ¿Puedes sentirlo?- Logro escucharse desde lo mas profundo de la joven oradora, quien hablaba ahora con voz seductora y angelical sin para aun en esta accion de rezar. Sus ojos permanecian cerrados, ocultando la belleza que detras se hallaba. ¡Por los dioses! que hermosa era la voz de la joven, entonando en perfeccion con la belleza de su tez blanca y transparentada detras de el velo, y con que firmeza hablaba en una devocion magistral digna de una virgen. Aun en medio de la tempestad ella parecia un angel venido desde las profundidades a limpiar con sus lagrimas el sucio mundo de los humanos, impuro y hostil. -Es la venida de la muerte- Hablo nuevamente entonando cada vez mas, como si un coro de sirenas cantara detras de sus palabras, las cuales estaban cargadas de sentimiento, manchadas con dejes de locura.
-¿Acaso no sientes aquella locura alzarse?- Reclamaba en incognitas mientras la tempestad seguia, tomando fuerza cada vez que la joven se callaba y calmando su furia cada vez que hablaba, como si la misma naturaleza le dedicara poemas de destruccion y muerte a la mujer de largos cabellos. Asimismo por culpa de la tormenta el suelo se resquebrajaba mas y mas, perdiendo dureza el frio hielo y dejando pasar abundantes cantidades de agua helada. -Oh Valiente Caballero!! Seguramente no puedes permitir que la muerte consuma a todos!!- Mas grietas se abrieron, mas profundas y mas grandes, la gente corria desesperada por sus vidas, sabiendo quizas en lo mas profundo de su ser que no podrian vivir mucho mas. Algunos mas caian en el agua, presos en vida de las fauces del mar. Otros se ocultaban, la joven era un presagio de muerte y ellos lo sabian. Mas gente caia sin remedio, ya varios mas habian muerto por el desastre. ¿Esto era una prueba? La voluntad de dios parecia desearlo asi, quien era esta mujer que hablaba palabras de muerte, invocando la destruccion sobre el lugar donde posaba sus rodillas. ¿Que podia hacer esa pobre gente mas que correr o morir en una agonia helada?
-Ven a mi...- Termino pidiendo la holografica mujer refiriendose en todo momento al caballero de oro, su semblante no cambio, su cabello se movia de lado a lado como en un principio, su rezo continuo y sus palabras se detuvieron. La matanza divina en el extremo norte del mundo seguia. ¿Podria Camus de Acuario detener la voluntad de dios? La chica oradora solo se limito a esperar respuesta**

**-¿Y acaso pensas que te tengo miedo?- Exclamo en orgullo desmedido la mujer que oraba, extrañamente y aunque la voz parecia venir de su misma garganta, el tono era diferente, mas grave, como si la voz hombre joven hubiera poseido sus cerdas vocales. Asimismo, mientras su hablar se apagaba, sus parpados se abrian rapidamente, mostrando por primera vez sus ojos sin velo, como dos faros endemoniados que harian suspirar de horror a quien los vea. Su mirada se clavo de lleno en el santo de Athena, su adorado rostro tan bello como el hielo se desfiguro en un instante y su palida piel se torno roja y escamosa. ¿Que clase de horrores guardaba la mujer que tan bella parecia?.
Un grito se ollo salir desde lo mas profundo de sus entrañas, un desgarrador alarido lleno de lastimosa rabia y maldad, que parecia nunca acabar. Su vestido blanco de seda, ahora rasgado por la misma mujer se levanto en un instante, fulgurando debajo de ella una luz blanca que titilo 6 veces, antes de que de ella surgiera una imagen escalofriante, 6 animales monstruosos nacian desde las piernas de la mujer, desfigurandose su imagen de forma instantanea. Todas ellas miraban fijo al dorado sin que nadie pudiera distinguir bien su forma, el tiempo se detuvo un instante, hasta que de un momento a otro la imagen viva de la doncella estallo siendo liberados los mounstros que surgian de sus entrañas. A extrema velocidad marcharon hacia el caballero en forma de luces, en total eran 6 y cada una atacaba por costados diferentes, dos atacaron la cabeza, dos el torso y dos las piernas cubriendo los flancos delanteros de Camus en un instante, buscando devorarlo por completo. Al igual que la joven, los animales parecian desfigurarse y transparentarse, pero su feroz ataque se veia tan real como la tormenta que caia sobre Siberia. Camus estaba en aprieto, las fauces de 6 bestias estaban cerca de su cuerpo y el caballero seguramente sorprendido ante este suceso podria no tener tiempo de actuar para defenderse o esquivar. La batalla habia iniciado, el reino submarino daba el primer paso**

**Extraños fenomenos se percibian en la fria tierra de Siberia, en donde desde hacia varios minutos una confrontacion se estaba dando lugar. Al cambiar de apariencia la mujer que rezaba al mar y expulsar de su ser a 6 poderosas escencias, su entera humanidad se desvanece lentamente, dejando una incognita de lo que habia pasado en el lugar y de quien era esta extraña mujer. Por otro lado, la acometida de las 6 proyecciones cosmicas lanzadas hacia el caballero dorado, habia sido espectacularmente eludida por el mismo quien ahora cobardemente se ocultaba tras una neblina espesa que parecio salir de la nada, sin lugar a dudas Siberia era una tierra extraña, y los caballeros estaban demostrando gran habilidad, seria imprudente no tomar esto en cuenta.
Sin embargo algo parecia habersele escapado a Acuario, algo que quizas le costaria la vida en este instante, pues la acometida de las bestias, aunque eludida habia sido, estaba muy lejos de terminar. Asi fue como 5 de los 6 resplandores multiformes que habia lanzado la mujer, desaparecen ante la evasion del santo, mas uno de ellos, uno de los aereos que ataco a la cabeza siguio su camino a extrema velocidad, tomando mas forma en el camino y metiendose de lleno en la espesa nube de neblina en la que huia el caballero. Un chillido casi inaudible se escucho cuando el resplandor, cuya forma terrorifica se asemejaba a un murcielago brillante, ingreso en la niebla.
¿Que pasaba dentro de la nube de escarcha que cubria ambas figuras? Un nuevo chirrido se escucho, solo que ahora mas lejando y veloz. Dentro de la neblina el "Murcielago" dio un giro lanzandose a la velocidad mas rapida que podia alcanzar, y la mas sigilosa tambien, al encuentro de un objeto que parecia haber hallado con sus chirridos. Como todos sabemos, estos animales son ciegos y encuentran a sus presas con leves chirridos que hacen rebotar en los objetos, obteniendo de esta manera un mapa de la zona en la que estan cuando escuchan el impacto del sonido. Este metodo de sonar es increiblemente efectivo, la forma en que Camus intentaba ocultarse simplemente no serviria, pues para el ken vampiro era juego de niños encontrarlo.
De esta manera Camus fue hallado, de esta manera el murcielago que habia salido de la extraña mujer junto a otras 5 criaturas indefinidas por el momento, se habia lazando hacia su enemigo al haberlo encontrado, a gran velocidad buscando clavar sus colmillos en el cuello del dorado drenando su sangre y energia rapidamente. Desgraciadamente para el dorado, el vampiro estaba posicionado a su lado, desgraciadamente para Camus todo esto habia ocurrido mientras el escapaba y con la compleja serie de movimientos que habia realizado seguramente seria incapaz de incluso percatarse de la presencia del vampiro antes de que sea demasiado tarde. ¿Como terminaria este suceso?¿Que habia pasado con la mujer y las otras 5 bestias? las incognitas seguian sin responder, y el conocedor de las respuestas era testigo de todo lo que pasaba desde un lugar indefinido. El poder de Poseidon y sus criaturas marinas era simplemente divino.**